Muy de vez en cuando la vida me premia.
Una familia peculiar, algo disfuncional, pero unida, con lazos transparentes que nunca desaparecerán. Un grupo de amigos eclécticos, dónde el respeto es la base para continuar juntos después de varios años. Un trabajo dónde puedo explotar mis dones y aprender día a día.
Uno crece, aprende, agradece y cuándo llega el momento indicado dice: "Aquí pertenezco".
Gracias, ya no te soy ajeno, ni tu lo eres para mí.
Si te dan una cachetada, pon la otra mejilla, por lo menos el color se emparejará.
Track del momento: I feel it all, Feist.
martes, 8 de junio de 2010
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